La cirugía plástica vaginal agrupa varios procedimientos para embellecer el área genital y mejorar la calidad de las relaciones sexuales. Se puede dividir en procedimientos externos e internos. Los procedimientos externos embellecen el área genital y se conocen también como labioplastia. Los procedimientos internos mejoran la calidad de las relaciones sexuales y son conocidos igualmente como vaginoplastia. Con una labioplastia generalmente se logra disminuir el tamaño de los labios menores y/o mayores de la vagina que pueden alargarse y arrugarse por los embarazos, el paso del tiempo o por genética. Generalmente la vaginoplastia es realizada para estrechar la vagina y lograr así mayor gratificación sexual tanto para la mujer como para el hombre durante la relación sexual.
INDICACIONES
Esta intervención quirúrgica es apta para mujeres de cualquier edad, aunque son sobre todo mujeres adultas las que demandan este tipo de operaciones debido a labios mayores hipotróficos por el envejecimiento o canal vaginal ensanchado. Además se indica en mujeres jóvenes que se sienten inconformes con el tamaño de sus labios menores
PROCEDIMIENTO
Antes de la cirugía todos los pacientes requieren ser evaluados por el anestesiólogo, quienes son certificados, con todas las licencias y estándares requeridos y especialmente con gran experiencia en el manejo de pacientes de cirugía plástica estética, brindando un servicio de alta calidad y seguridad.
Generalmente se realiza con anestesia local o regional, sin necesidad de hospitalización . Es una cirugía que no es dolorosa aunque sí molesta. Los puntos de sutura que se utilizan normalmente se reabsorben, por tanto, no hay necesidad de sacarlos evitando así las consecuentes molestias. Aproximadamente un mes después de la intervención la paciente puede reanudar su vida normal.
Debido al trabajo de parto y la falta de firmeza de los tejidos, la vagina se ensancha y los tejidos musculares pierden su firmeza y tono, por esto, esta intervención quirúrgica se encarga de reforzar los músculos, reforzar las fascias, moldear y resecar el exceso de mucosa vaginal, haciendo más pequeño el diámetro de la vagina.
Esto también influye en la actividad sexual de algunas mujeres y también de sus parejas por la disminución de la fricción que sienten durante las relaciones sexuales.
Además del punto de vista estético que conseguimos con esta operación y la recuperación del placer sexual, esta cirugía sirve para la reconstrucción del suelo pélvico.
¿Qué otras técnicas quirúrgicas incluye la cirugía íntima?
- Labioplastia de reducción: Se trata de la reducción y remodelación de los labios menores que se hayan hipertrofiados o de longitudes desiguales. Estos agrandamientos pueden ser de nacimiento, o debido al envejecimiento o a los partos. Los motivos para repararlos son funcionales (molestias o incomodidad al vestir, al practicar determinados deportes o durante las relaciones sexuales), o bien, estéticos.
- Labioplastia de aumento: Los labios mayores pueden adquirir una apariencia más joven al aumentar el tamaño mediante la infiltración de grasa obtenida con técnicas de liposucción de otras zonas de cuerpo (lipofilling) o mediante la infiltración de ácido hialurónico.
- Liposucción de pubis: Consiste en la reducción del exceso de acumulo graso de esta zona mediante liposucción.
- Lifting de pubis: Se realiza cuando observamos exceso de piel flácida, a consecuencia del envejecimiento o de adelgazamientos importantes. Esta técnica consiste en resecar la piel tensando la zona.
- Himenoplastia o reconstrucción del himen: Se puede realizar de forma independiente o conjuntamente cuando se realiza una vaginoplastia o rejuvenecimiento vaginal. En ocasiones la demanda de esta intervención quirúrgica es por motivos culturales o religiosos.